(Prensa El Evangelio Cambia 19 de mayo de 2022).- El Evangelio Cambia se trasladó hasta los principales sitios turísticos de Venezuela este pasado viernes 15 de mayo, visitando playas, parques, ríos, plazas y principales sitios de concentración masiva, con el propósito de compartir a los temporadistas un mensaje amor, fe y reconciliación durante Semana Santa, en el que cientos de miles de personas reconocieron el sacrificio que Jesús hizo en la Cruz por ellos y les pidieron que entrase en sus corazones.
Las personas que lograron escuchar el mensaje, afirmaron que: “Jesús es el único que puede salvar a la humanidad”; algunos al ver la actividad desarrollada reconocieron que algo pasó en sus corazones, deseando dejar atrás su pasada forma de vivir y anhelando que sea Dios quien empiece a guiar sus pasos. Félix Parra, mencionó: “Lloré con mi familia, nos abrazamos, vivimos una experiencia increíble y diferente, sentí una alegría inmensa”.
En Cayo Muerto, Chichiriviche, estado Falcón, Reina Alvarado, quien labora en el lugar, agradeció al voluntariado por su visita, y afirmó que fue llena del amor de Jesús, “estas horas de disfrute con ustedes han sido muy amenas”, afirmó, y concluyó su mensaje diciendo: “Bienvenidos siempre a Cayo Muerto en el Parque Nacional Morrocoy”.
En Puerto Cabello, estado Carabobo, el voluntariado se presentó en el Centro Social Latino; su director, Carlos Vasquez, compartió que socios del lugar lloraron con las presentaciones realizadas y le agradecieron por el acceso de El Evangelio Cambia al recinto. Por su parte, animó al voluntariado a continuar con su labor: “Sigan trabajando, porque a través de esta labor rescatan corazones. No decaigan, insistan, porque es muy bonito lo que ustedes hacen”, y finalizó expresando: “Cuenten con mi apoyo, las puertas del Centro Social Latino están abiertas”.
De esta manera, fue evidente como el perdón de Jesús abrazó la vida de miles de temporaditas que se dieron cita en los principales sitios turísticos de Venezuela en esta Semana Santa, quienes no solo vivieron momentos de disfrute, sino de reflexión.