Miles de personas vuelven a sonreír gracias a un acto de bondad
(Prensa El Evangelio Cambia, 20 de mayo de 2019).- En Barinas, con motivo a la celebración del Día de la Familia, El Evangelio Cambia en esta localidad, salió a las calles con el objetivo de llevar un mensaje de paz y esperanza a las familias venezolanas. Asimismo, los evangelizadores aprovecharon la oportunidad para orar a Dios por la unidad y restauración de cada hogar que conforma este país, y a través de pancartas comunicaron mensajes instando a las familias a seguir a Jesús. También, en el sector Raúl Leoni de este mismo estado, los evangelizadores hicieron un recorrido casa por casa para hablarle a los lugareños acerca del amor que Jesús siente por cada uno de ellos, y a su vez instarles a caminar siguiendo sus pasos, teniendo como resultado que más de 45 personas aceptaran este llamado.
En Falcón, durante el mes de abril más de 600 personas habitantes de la urbanización Francisco de Miranda, decidieron empezar a practicar valores de la vida de Jesús, luego de varias visitas del voluntariado al lugar, en la que conocieron acerca de los beneficios de vivir una vida caminando de la mano de Dios. En cada encuentro, a través de obras teatrales, coreografías y la conversación de persona a persona los voluntarios caracterizados por una actitud de amor y esperanza transmitían el mensaje a los lugareños, quienes con lágrimas en sus ojos expresaban su gratitud por las muestras de bondad brindadas y aceptaban la invitación de dejar entrar a Jesús en sus corazones.
En Falcón, durante el mes de abril más de 600 personas habitantes de la urbanización Francisco de Miranda, decidieron empezar a practicar valores de la vida de Jesús, luego de varias visitas del voluntariado al lugar, en la que conocieron acerca de los beneficios de vivir una vida caminando de la mano de Dios. En cada encuentro, a través de obras teatrales, coreografías y la conversación de persona a persona los voluntarios caracterizados por una actitud de amor y esperanza transmitían el mensaje a los lugareños, quienes con lágrimas en sus ojos expresaban su gratitud por las muestras de bondad brindadas y aceptaban la invitación de dejar entrar a Jesús en sus corazones.
De igual forma, con motivo a la celebración del Día de las Madres, en la parroquia Miguel Peña de Valencia, se brindó un esmerado servicio de solidaridad y amor a los habitantes del sector, en el que se repartió el tradicional plato de sopa, se ofreció servicio de peluquería, barbería, y los niños tuvieron espacios en los que se divirtieron con juegos recreativos y didácticos. En Parque Valencia – Carabobo, también se desarrolló una Jornada de Acción Social con la finalidad de honrar a las madres en su día, en la que fueron repartidos alimentos preparados a los habitantes del sector; además, las damas disfrutaron del servicio de peluquería, los caballeros barbería, y los niños de pinta caritas y juegos didácticos. Igualmente, las madres recibieron obsequios especiales que llenaron de alegría y agradecimiento sus corazones.
En Puerto Cabello, el mensaje de Jesús continúa llegando a todo lugar; fue así, como un grupo de voluntarios realizaron una visita al Centro de Diagnóstico Integral (CDI) en la entidad, para pedirle a Dios por la salud de los recluidos en este espacio, y con el objetivo de que cada uno de ellos coloque la confianza en Jesús, sabiendo que Él puede sanarles de cualquier enfermedad. En esta misma localidad, los voluntarios se dirigieron al ancianato Beneficencia El Carmen para a través de un compartir llenar de alegría a los ancianos del lugar. En esta oportunidad los beneficiados disfrutaron de una taza de café y panes, y les agradecieron a los voluntarios por la grata compañía.
En Táchira, más de 100 voluntarios llegaron cargados con muestras de amor y solidaridad al Hospital Central de San Cristóbal, para sorprender a los pacientes y familiares. Fue así, como con gran receptividad las puertas se les abrieron a los voluntarios, quienes prepararon alimentos en la cocina del centro hospitalario, para así ser repartidas más de 700 arepas y 500 platos de sopa. Además, se donó ropa, zapatos y juguetes usados en óptimas condiciones, y se realizaron actividades recreativas y obras teatrales que permitieron que los niños se olvidaran por un momento de su condición y solo se ocuparan en divertirse. Igualmente, se realizó una jornada de limpieza tanto en el área interna como externa de las instalaciones de este recinto, quedando en evidencia el acto de bondad de este equipo de voluntarios.
Cabe destacar que, cada voluntario dejó en este lugar más que con palabras con hechos tangibles a los recluidos, sus familiares y personal que labora en la institución el amor, la compasión y misericordia que Jesús siente por cada uno de ellos. Finalmente, el voluntario comunicó a los pacientes y demás personas que el gran acto heroico de Jesús en la cruz fue para pagar el precio por las enfermedades del ser humano, motivándoles a que creyeran en Él y colocaran toda su confianza en que podía sanarles, terminando este encuentro con un momento en el que juntos oraron a Dios por un milagro en sus cuerpos.